viernes, 3 de diciembre de 2010

¿CONTRADICTORIO?


Inestabilidad estable dentro de este
mundo irracionalmente racionable.
Contradicción asertiva por un apego
necesariamente deseable ante la
compañia indeseable de la soledad.
¿Incoherencia dices?
Conciencia seria la palabra
más considerable,
pero uno nunca sabe,
así es de impredecible el amanecer
de cada viaje.
¿Algún argumento vacilante?
¿Algo que a mis palabras las haga menos importantes?
Titubeo y éxtasis...
Certeza y susceptibilidad...
Eso y más, es lo que hace a esta
existencia inauditamente fascinante.
aP.

miércoles, 30 de junio de 2010


Manchando cada recuerdo con tus
palabras dichas en un tenor diferente al
que solo hace algunas lunas vivíamos.
Creyendo en la fuerza del mar por el cual
cada madrugada flotaban besos y caricias
dadas por un supuesto apego a mi alma.
Este día que ahora sus horas son tan
efímeras y simples como un otoño
sin ese viento que lo distigue,
le he prometido a mi reflejo no esperar
un día que no llegará, con tu esencia
entre sus manos y tu aliento al suspirar.
Todo es fugas y pasajero...
la vida misma lo es...
¿Por qué habría de serme permanente tu mirada?
Vana ilusión de creerte mío,
y a fin de cuentas,
entender que no tengo nada,
que ni los días que vivo me pertenecen,
que todo va quedando atrás.
Que solo los recuerdos me hacen sentir
cierta nostalgia y que si lo analizo bien,
ni la nostalgia misma me pertenece.
Solo tengo un segundo en cada presente
para padecerte y entender después
que no me perteneces.
aP.

miércoles, 27 de enero de 2010

Y ASI FUE...



Y así fue como sucedió…
Así fue como le encontré sentido a tus palabras y hacían surgir nuevas ideas al escribir.

¿Aun que me pregunto en ocasiones como pude exponerme así de fácil a tu calor?

¿Como fue que te mostré la película de mi vida sin condición?

Porque he empapado mi almohada con el recuerdo de tus bellas palabras, pero siempre con el temor de no lastimarte con las huellas profundas que dejaron en mi camino.

Más sin embargo todo esto ha sido en vano, porque cada vez que te pienso, es más fuerte el destino que mi miedo a seguir viviendo.

Porque tal vez algún día nuestras mirada se crucen y pueda ver directamente esa alma que sufrirá con los azotes del viento, y sé que ella no lo merece.

Pero como evitarlo, intento hacerlo, pero esta lucha constante me debilita a cada momento, cuando mi conciencia me grita lo mucho que te quiero.

Y así fue como sucedió…

Así fue como le encontré sentido a tus palabras, besando en cada una de ellas tus sentimientos.
aP.

ANGEL APASIBLE

UN ANGEL LLORA

little angel